4/4/09

¿Y si tiembla en tu relación?


Hace algunos meses pudimos escuchar en la radio y en la televisión el nuevo tema del grupo nacional Viento en Contra, “Tiembla el Suelo” Hoy a todos nos tembló el suelo pero, ¿qué hacemos cuando nuestra relación empieza a temblar?
Es casi imposible tener diferencias o discusiones en una relación de pareja hoy en día. Las personas vivimos en un mundo lleno de “stress” y presiones que a veces nos vuelven un poco más fríos con el resto de personas que puedan rodearnos. Esto luego traerá como consecuencia que las relaciones se debiliten y algunas veces se pierdan dejando grandes vacios en la vida de uno, sin oportunidad de regresar el tiempo.
Una de las soluciones más importantes tiempos de crisis emocionales es tener confianza en sí mismo y saber que uno es capaz de tomar el control del problema, hacer el intento por rescatarlo y solucionar lo que pueda estarnos afectando y claro, la confianza en esa persona también es vital. Pero nada será tan importante como lo es la comunicación. Si nosotros motivamos a que exista una plática, algún modo de comunicarnos sanamente, podemos llegar a un punto neutro o si bien nos va, de beneficio para ambos lados. No permitamos que un temblor nos llene de temor o incluso de llevarnos a perder algo muy valioso. Recordemos que nosotros somos capaces de luchar y de valorar las relaciones y esas personas que nosotros escogimos para rodear nuestro mundo. Cada persona, cada relación y cada mundo serán diferentes, pero con perseverancia, fe y valentía… todos podemos alcanzar esa meta, ese sueño.

CUIDADO, no pierdas el control o las fuerzas si esa relación no te conviene rescatar, recuérdalo como algo especial y sobre todo, recuerda que vales mucho y que siempre que se debe cerrar una puerta, se deberá abrir una nueva!

Mario C.

2 comentarios:

  1. Fondo:
    Efectivamente, las sociedades contemporáneas presentan elevados índices de estrés. Sin embargo, el autor no refuerza sus argumentos con estadísticas o fuentes de peso. En consecuencia, el texto es poco persuasivo.

    Forma:
    - Las ideas están mal estructuradas. La primera oración, por ejemplo, es en realidad un párrafo de tres enunciados.
    - Falta un “no” en la primera oración del segundo párrafo. “Es casi imposible no tener diferencias o discusiones…”.
    - En el tercer párrafo faltan comas y palabras que den sentido a las ideas.

    - Aunque hay pocos errores de ortografía, el texto está escrito “como se habla.

    El corrector de sección: Francisco A. Sapón Orellana

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